Han acabado los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 con diversas sensaciones para la delegación y los aficionados mexicanos. Sin dudas, uno de los puntos positivos de la gran cita deportiva ha sido la Medalla de Bronce obtenida en tierras niponas por la Selección de México que comandó Jaime Lozano.

Después de un gran torneo, el equipo Tricolor arribó a las semifinales en búsqueda de la gran final frente al Brasil de Dani Alves, Richarlison y compañía, y tras un juego reñido cayó finalmente en la tanda de los penaltis, accediendo al juego por la tercera presea. Allí lo esperaba Japón, frente al cual el combinado nacional sacó a relucir su jerarquía y derrotó al local para así subirse al podio, desatando festejos de todos los seguidores.

 

Este domingo 8 de agosto, los 22 jugadores convocados y el cuerpo técnico encabezado por Jimmy arribaron al aeropuerto de la Ciudad de México a alrededor de las 16:00 horas, para en las horas posteriores reportar con sus respectivos clubes. Por supuesto, un gran número de familiares y fanáticos estaban allí esperándolos con una verdadera fiesta.

 

 

Uno de los grandes atractivos en la previa fue la música que se pudo oir tocar a unos mariachis mientras una multitud esperaba por la aparición de los futbolsitas. Mientras tanto, familiares de los medallistas exhibían globos, playeras y pancartas con emotivos mensajes. "Bienvenidos medallistas olímpicos, los amamos", rezaba una de ellas.

El primer elemento en salir y ser ovacionado fue Luis Romo, mediocampista de Cruz Azul y elemento clave en el proceso olímpico, que fue recibido por su familia con un ramo de flores. Luego se pudo ver al capitán y emblema de este Tri, el portero Guillermo Ochoa, el mediocampista Diego Lainez, el entrenador Jimmy Lozano y resto de los elementos de la plantilla que fueron haciéndose presentes para disfrutar de un tiempo junto a los suyos antes de retomar su actividad profesional.