No cabe duda de que Benfica es una de las instituciones grandes de Portugal e incluso, uno de los equipos más conocidos de Europa; sin embargo, en esta ocasión es motivo de noticia por un hecho francamente lamentable, en el que los acusan de soborno.

Y es que en un informe compartido por el periódico Expresso, de Portugal, Edgar Costa, jugador de Maritimo, afirmó que en el temporada 2015/1016, fue invitado por parte de Miguel Pinho, representante de jugadores a que fuera a un hotel para allí ofrecerle dinero para que su equipo perdiera el partido ante las Águilas.

Pensando que era una oportunidad laboral con ese agente de jugadores, fue llevado a una habitación previo al juego y allí contó: "estaban allí en nombre del Benfica, y me ofrecieron 30.000 euros si estaba dispuesto a jugar mal y no tirar a puerta".

Situación a la cual el jugador se negó ya que como manifestó para el semanario, quería mantenerse como "un hombre libre". Incluso, él fue uno de los jugadores anónimos que en el pasado habló sobre presuntos casos de corrupción y soborno por parte de Benfica.

Por su parte, Pinho, el representante de jugadores es conocido porque es el apoderado de cracks de talla mundial como los internacionales portugueses, Bruno Fernandes, de Manchester United, Bruno Mendes, quien actualmente juega en PSG.