Sergio Busquets y el final por Barcelona se ese once que dominase Europa en el 2011 se roban todas las miradas de la prensa deportiva española en una mañana donde ya hay trabajo por delante y donde la planeación de la próxima temporada en el conjunto culé no se detiene. Llega el turno de saber que ocurrirá con un Jordi Alba cuyo futuro cuesta y mucho dinero a Joan Laporta.

No solo el título de LaLiga que llegará más pronto que tarde entra en la agenda, no solo soñar con Lionel Messi se encuentra encima de la mesa o las obras en un Camp Nou que se prepara para su hasta luego aparece en el horizonte. Barcelona sigue moviéndose pensando en una campaña 2023/2024 donde existen casos puntuales a resolver y donde recaudar dinero como sabemos, se hace imperante.

 

La marcha de Busquets, falta saber si a la MLS o Arabia Saudita, supone tanto un dolor para las gradas del feudo blaugrana como un alivio en su economía. Joan Laporta trabaja de manera incesante para conseguir una serie de objetivos que permitan al club situarse de la mejor manera posible para un verano donde las operaciones low cost y el famoso Fair Play Financiero de LaLiga serán el único tema de actualidad.

Jordi Alba: Getty

Jordi Alba: Getty

Jordi Alba, tema de estado

El lateral de 34 años, tercero en la lucha por el puesta detrás de Alejandro Balde o Marcos Alonso, se prepara para un último año de contrato donde entre las amortizaciones realizadas por el club en los tiempos de la pandemia, así como los vínculos laborales firmados bajo la era Bartomeu, Barcelona le debe un total de 36 millones de euros que ahora mismo no sobran. Sus agentes pasaron ayer por el Camp Nou.

La directiva busca que renuncie a buena parte de las deudas que se tienen con su contrato según informaron desde COPE o en caso de que no se llegue a un acuerdo en este sentido, que el lateral acepte marcharse para evitar así el pago de un monto que Barcelona necesita no solo pensando en fichajes, sino por encima de todo en su recuperación económica para una temporada donde habrá menos ingresos que nunca. El futuro de Jordi Alba, tema de estado en Barcelona.