Este sábado, Real Madrid recibió en el estadio Santiago Bernabéu a Villarreal por la sexta fecha de la Liga de España. El marcador terminó 0-0, y de esta manera los blancos siguen al frente del torneo con 17 puntos, tres más que su inmediato perseguidor, Sevilla.
El juego cumplió con lo que se tenía proyectado pese a que nunca se pudo romper el cero. A lo largo de la primera parte, hubo llegadas de gol de lado y lado, los locales se aproximaron más, pero los de la comunidad valenciana ocasionaron más peligro sobre el pórtico defendido por Thibaut Courtois.
Después de la media hora del compromiso, los visitantes le pusieron los pelos de punta a los asistentes a la Casa Blanca, ya que en ese tramo del cotejo tuvieron sus mejores oportunidades de anotar. Paco Alcacer y Arnaut Groeneveld, fueron los que hicieron protagonista al arquero belga.
Hubo un hecho curioso al término de los primeros 45, ya que los hinchas que hicieron presencia en el escenario deportivo silbaron en unísono tanto a los futbolistas del cuadro capitalino, como al juez central, Gil Manzano, quien tuvo decisiones bastantes comprometedoras y que no gustaron al respetable.
La etapa complementaria tuvo a un inspiradísimo equipo madridista en sus primeros minutos. Tanto defensas como delanteros se insinuaron sobre el marco defendido por el arquero argentino Gerónimo Rulli, quien entró en acción tras llegadas de Vinicius Junior y Eder Militao.
Los dirigidos por Carlo Ancelotti dominaron durante el segundo acto, sin embargo, y pese a los cambios que hizo el entrenador italiano no se pudo alterar el marcador. Al final, uno de los que ingresó, Isco, tuvo la opción de anotar, pero se estrelló con un inmenso guardameta argentino.