La suerte de los penales le sonrió, por fin, a Rosario Central.

Matías Caruzzo fue el ejecutante del último tiro desde los 12 pasos que coronó al canalla como campeón de la Copa Argentina.

Gimnasia (Santiago Silva y Manuel Guanini) falló sus dos primeros remates, mientras que el ganador convirtió las 4 ejecuciones. 

Los dirigidos por Edgardo Bauza se sacaron la mufa tras tres finales perdidas en la competencia. ¡Rosario es una fiesta!