El 20 de febrero de 2016 la vida de Ezequiel Unsain dio un giro drástico. Defendiendo el arco de Newells, el arquero de La Lepra recibió un contundente rodillazo de Carlos Tévez.

Luego de dicha acción, el arquero se desplomó y preocupó a todos. Luego que se le realizaron estudios, se confirmó que el guardametas sufrió una doble fractura de maxilar inferior.

Para retornar a Primera División, Unsain tuvo que recorrer un largo camino, el cual duró aproximadamente nada más ni nada menos que un año.

El arquero tuvo que surcar muchos obstáculos. Primero y principal, dado que se alimentó a base de yogurt y flan (entre otras cosas), perdió varios kilos fruto de la dieta que tuvo que hacer.

Además se tuvo que trabajar desde lo psicológico: Ezequiel confesó que sentía cierto temor en la zona cuando se acercaban a saludarlo.

Para cerrar, otro aspecto tratado fue lo futbolístico. Retomar las actividades, ponerse a la par del resto y volver a tener la confianza necesaria no son cosas que se logran en poco tiempo.