El argentino fue el autor de los dos tantos del triunfo de Barcelona sobre Leganés, pero prácticamente no festejó ninguno de ellos. Así vivió el partido la Pulga.

Lionel Messi busca el éxito constantemente, pero, claramente, no es partidario de ganar de cualquiera manera y hoy quedó demostrado nuevamente. Es que Barcelona jugó muy mal y se impuso, de forma agónica y polémica, por 2-1 como local del humilde Leganés.

Luego de ser vapuleado frente a Paris Saint-Germain por la Champions League, el equipo de Luis Enrique se presentó en el Camp Nou por una nueva jornada de La Liga de España. Nuevamente, los catalanes no jugaron nada bien y quedaron en deuda con sus seguidores.

La figura del partido fue Messi, que marcó ambos tantos pero prácticamente no festejó ninguno de ellos. El crack argentino parece que no se fue conforme con la forma en la que jugó su equipo y su rostro lo demostró de forma contundente en ambas conquistas.

+ El resumen del partido: