Cuando Giannis Antetokounmpo llegó a la liga en 2013, lo hizo prácticamente como un desconocido, y los Milwaukee Bucks incluso fueron criticados por seleccionarlo con el 15to pick de la primera ronda del Draft de la NBA.

Ahora, ese jovencito largirucho y delgado de ascendencia nigeriana y griega, está a punto de convertirse en el jugador mejor pagado de la historia de la NBA, después de vivir una triste historia de pobreza durante los primeros años de su vida.

Y es que, después de ser escogido en el mejor quinteto All-NBA de la liga, el Greek Freak es ahora elegible para optar por una extensión de contrato supermax en 2020 que lo mantendría con los Bucks por 5 años más a razón de 247 millones de dólares.

Dicha extensión de contrato le endosaría la módica suma de 56 millones de dólares tan solo en su último año de contrato y, si bien puede parecer muchísimo dinero por un solo jugador, estamos hablando de una estrella en ascenso que aún ni roza el techo de su desarrollo y ya es el principal candidato al MVP de la liga.

Giannis sigue mejorando año tras año y lideró a su equipo al mejor récord de toda la NBA y las Finales de la Conferencia Este con tan solo 24 años de edad, por lo que los Bucks no dudarían en realizar una inversión de este calibre en él.

A lo largo de la campaña regular y los playoffs, el alero griego ha dejado promedios sumamente impresionantes, con 27.7 puntos, 12.5 rebotes, 5.9 asistencias, 1.3 robos y 1.5 bloqueos por partido en 57% de campo.