El Loco abrió su corazón y dio a conocer los detalles de su vida privada que lo llevaron a cometer actos de indisciplina cuando defendía la camiseta de la Selección.

Durante los últimos años, Juan Manuel Vargas fue perdiendo la jerarquía que le permitió jugar en equipos como Fiorentina (Italia) y Real Betis (España). Por eso, el volante peruano decidió empezar de cero y, a comienzos del 2017, regresó a Universitario de Deportes.

Claro, su bajón futbolístico tiene una explicación y el mismo Vargas fue el que dio a conocer detalles sobre este tema: "He tenido etapas. Hay momentos en lo no he sido tan profesional. Pero el por qué es muy fácil. Habían momentos que no me importaba nada. Había muerto mi abuelo, había muerto mi abuela, había muerto un tío. Y como yo estaba fuera, sentía que no había disfrutado el momento con ellos. Son cosas que me chocaron. Es gente que he amado. Entonces a veces me dejé llevar. Eso es lo que los demás no saben. Yo no puedo explicarle a todo el mundo lo que siento. Lo que puedan decir o no, no me interesa. Todo es parte de mi proceso de madurez".

Habían momentos que no me importaba nada

"Yo no voy a decir que no me gusta mi cerveza. Yo puedo hacer lo que quiera. Es mi vida y sé lo que puedo hacer y en qué momento hacerlo. Entonces viene la mal intención. Y este un país donde el morbo gusta mucho y por eso la prensa informa de cosas negativas. Los medios a veces exageran un poco. Pero al final las palabras se las llevan al tiempo y no me interesa", agregó el Loco. Una confesión más que llamativa del actual jugador de la "U".

+ Golazo de Vargas en su regreso a Universitario: