La extinta liga de básquetbol ABA fue la antecesora de lo que hoy conocemos como la NBA, pero: ¿a qué se debió que se acabará? Las drogas, las apuestas, la peleas y el racismo, llevaron a la ruina a una competición en Norteamérica que tuvo grandes figuras del baloncesto.

Un ejemplo de lo que pasó por los años 60’s fue Marvin Barnes, quien es considerado como uno de los talentos más desperdiciados que no pudo triunfar en la NBA por sus adicciones a la droga, al alcohol y a las mujeres. Su historia no empezó nada fácil, tuvo que enfrentarse a un padre alcohólico y ahí pasó su infancia entre traficantes y balas.

De apoco empezó a desarrollar un potencial atlético único y un talento diferente a los jóvenes de su edad. Anotaba de todos los modos y estilos en la pintura, obtenían rebotes con el mínimo esfuerzo y repartía asistencias por doquier. La Universidad de Providence se fijó en él y empezó su contraste deportivo.

En 1963, Barnes lideró al equipo a su primer Final Four en la historia de la universidad, a pesar que fue acusado de golpear con una llave inglesa a uno de sus compañeros. Los Philadelphia 76ers lo seleccionaron en el Draft de 1974, pero decidió declinar la oferta de la NBA e irse a jugar a la ABA.     

En 1976 se acabó la ABA y llegó el momento para que Marvin brillará en la NBA, pero esto nunca pasó. “Consumía cocaína antes, durante y después de los juegos. Era una sombra de mí mismo”, afirmó Barnes sobre su paso por los Boston Celtics. ¿Y cómo acaba la historia? A sus 62 años terminó su vida en 2014 luego de no poder salir del mundo de las drogas y el narcotráfico.