Cuando se juega en un país tan grande como los Estados Unidos, los viajes de un estado a otro pueden ser completamente agotadores, incluso si se realizan con los mayores lujos como en el caso de los equipos profesionales.
Este fue el caso de los Astros de Houston, que no pudieron descansar lo suficiente después de su serie en Anaheim contra los Angelinos, antes de regresar a Texas para enfrentarse en el clásico de la ciudad contra los Rangers.
Los Astros jugaron en la noche del jueves ante los Angelinos y debieron viajar inmediatamente, pues su próximo compromiso era menos de 14 horas después, lo que generó la molestia en el seno de la organización:
“No creo que haya nadie contento por el viaje de toda la noche de ayer. Creo que es un completo error de cómo hacer un calendario. Realmente es absurdo,” declaró Jake Marsinick.
Esta no es la primera oportunidad en la que un equipo se ve sometido a este tipo de injusticias por culpa de la organización de la MLB, y, si bien los Astros cuentan con una plantilla sumamente profunda y muchos argumentos para trascender en la postemporada, queda claro que es necesaria una mejor organización por parte de la liga.