Por propia decisión de la cuestionada institución, Jerome Valcke, secretario general, ha sido suspendido. El funcionario estaba acusado de corrupción.
Cada mes trae una nueva mala noticia para FIFA. El paso del tiempo implica más acusaciones, más dirigentes investigados. En medio de la transición hacia las elecciones del 2016, ha sido apartado un nuevo nombre del ente madre del fútbol mundial.
Por reventa en 2014, el directivo habría ganado más de 2 millones de euros
Esta vez, la figura en cuestión es la de Jerome Valcke, imputado por sobornos en las adjudicaciones de sedes de Mundiales, tanto pasadas como futuras, el secretario general y mano derecha de Joseph Blatter.
El francés, también, está implicado en la red de reventa de entradas durante la Copa del Mundo de Brasil 2014. Denuncia documentada e iniciada por Benny Alon, exsocio en la venta de tickets y allegado a Michel Platini, opositor del actual presidente.
“Se han puesto en conocimiento de la FIFA ciertas alegaciones acerca del Secretario General y la FIFA ha solicitado a la Comisión de Ética de la FIFA que inicie una investigación formal”, dice el comunicado emitido por la institución.
Valcke ingresó al ente hace nada menos que doce años. Fue designado en el Comité Ejecutivo por expresa orden de Blatter y en 2007 se convirtió en el secretario general, cargo que deja este jueves aquejado a denuncias que golpean -cada vez más- a una institución que se creía intocable.
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