Fue el primer paso para el sueño mayor. Monterrey venció por 1 a 0 al Cruz Azul y quedó a un paso de meterse en la final, sin olvidar que todavía debe visitar el complicadísimo Estadio Azteca el fin de semana.

Los dirigidos por Diego Alonso realizaron un primer tiempo magnífico, en donde presionaron a La Máquina en todos los sectores del campo de juego, pero especialmente a sus defensores,para que nunca se sientan cómodos en el partido.

Ya en los primeros minutos se observo esto, con algunas aproximaciones y con el gol de Rodolfo Pizarro (la figura del partido), a los tres minutos del primer tiempo. Los zagueros del visitante no pudieron sacar la pelota, que fue robada por Rogelio Funes Mori. El argentino cedió para Dorlán Pabón, que lanzó un preciso centro a la cabeza del volante, llamativamente solo en el área chica.

Un par de centros no capturados por parte de Los Rayados podrían haber ampliado la ventaja. Si bien los locales merecieron más, la atajada de esa primera mitad fue de Marcelo Barovero, que a una mano desvió el cabezazo de Elías Hernández.

El segundo tiempo empezó con la misma tónica que el primero. Los Regios salieron con una intensidad mayor a la de su rival y en los primeros instantes pudieron hacer el segundo gol, pero Julio César Domínguez salvó casi sobre la línea.

Como era de esperarse, Monterrey aflojó la marcha promediando la segunda mitad, lo que provocó que los dirigidos por Pedro Caixinha tomen las riendas del juego, pero sin encontrar en ningún momento la fluidez que lo llevó a ser el puntero de la fase regular y vencer con holgura al Querétaro en la instancia previa.

Sin embargo, de contragolpe Funes Mori pudo liquidar el pleito en dos oportunidades, pero su balón primero rozó el travesaño y luego pegó en el palo.

El partido de vuelta se espera que sea sumamente atrapante. El sábado, a las 19:00, sabremos quien es el primer finalista de esta Liguilla.