Según los analistas expertos de ESPN es el pelotero favorito a ganar el premio MVP en la Serie Mundial 2020 MLB. Cada vez que toma un turno de bateo y se embasa, el espectáculo está garantizado, incluso pudo hacer feliz a todo Estados Unidos con el robo de una base. Hablamos de Mookie Betts, el pelotero que estuvo a punto de abandonar el sueño de las Grandes Ligas por discriminación.

Diana Collins, mamá de Betts, contó en una videoconferencia con la fundación de Los Angeles Dodgers que rechazaron a su hijo cuando quiso inscribirlo en una liga de béisbol infantil (Nashville, Tennessee) porque Mookie, quien tan solo tenía cinco años, era más pequeño y con brazos y piernas más cortas que los niños de su edad.

Ni una, ni dos; fueron tres veces la que rechazaron a Betts por su estatura. Mookie no soportó esta discriminación y veía cada vez más imposible el sueño llamado MLB. Su madre, Diana, no se quedó sin hacer nada y como toda mamá hizo hasta lo inimaginable para que Betts fuera feliz.

“Ella es como una mejor amiga, pero mi también es mi mamá. me disciplina de la misma manera que cualquier otra madre, pero siempre estuvo ahí para hablar conmigo. Podría ser honesto con ella”, afirmó Mookie Betts sobre la relación con su madre.

 

La mamá de Mookie Betts trabajó de coach por su hijo

Como ningún equipo de béisbol infantil en Estados Unidos quería recibir a Mookie Betts, la mamá del pelotero de los Dodgers decidió formar su propio equipo con niños que al igual que su hijo fueron rechazados por otros entrenadores. ¿Y adivina quién fue la coach? Pues la misma madre de Mookie Betts.