Sorpresa causó este lunes la aparición pública del mariscal de campo Ben Roethlisberger sin su mítica barba, la cual decidió cortarse luego de pagar una apuesta donde mostró avances de su recuperación lanzándole pases a tres de sus compañeros en los Pittsburgh Steelers de la National Football League (NFL).

Pero también generó fuertes críticas, como la del Gobernador del Estado de Pennsylvania, Tom Wolf, quien aseguró sobre esta acción que "cuando vas a un lugar como una barbería y no estás protegido, no me importa quién seas, las oportunidades del virus irrumpiendo en tu vida incrementan. Personalmente, creo que un habitante del estado deba tomar el riesgo. Yo no querría tomarlo".

Por lo mismo, tuvo que salir a aclarar la situación el responsable de rasurarle la barba a Big Ben, como fue Carlos Norman, el dueño de la barbería Norman's Cuttin'Edge Barber Shop, quien emitió un comunicado público, que fue publicado por ESPN, donde explicó que el hecho se debió a un "favor personal".

La declaración fue firmada por el abogado de Norman, Mark Kohnen, donde afirma que la barbería ha permanecido cerrada desde que se declaró la pandemia del Coronavirus, y que ha cumplido con la ley y regulaciones del Estado, por lo que lo ocurrido con el quarterback se debe a una larga relación de amistad entre su cliente y Roethlisberger, fue un favor personal y que no recibió dinero por esta acción.

Cabe señalar que en Pennsylvania todavía no está permitida la apertura de escenarios deportivos, producto del COVID-19, por lo que no se ha abierto el campo de entrenamiento de los Steelers, al menos, hasta el mes de junio.