El equipo Merengue se adelantó a lo que Barcelona ni siquiera pudo ver y estableció que quien quiera llevarse a Cristiano, Bale o Benzema sin negociar con el club deba pagar mil millones de euros.
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Florentino Pérez demostró, se coincida o no con su estilo de gestión, tener un gran olfato para los negocios cuando previó que los petrodólares iban a provocar un cimbronazo en las estructuras ya establecidas en torno al fútbol europeo.
Es que el mandamás del Real Madrid se adelantó a lo que en Barcelona ni siquiera pudieron ver y que terminó costándoles la perdida de Neymar y el fin de uno de los tridentes de ataque más importantes de las últimas décadas.
Sabiendo del surgimiento de nuevos gigantes económicos en el fútbol mundial, Florentino Pérez implementó la estrategia de blindar a sus máximas estrellas con cláusulas que podrían considerarse “fuera del mercado”. Un informe del diario ABC prueba que quien quiera llevarse a jugadores como Cristiano Ronaldo, Bale o Benzemá sin previa negociación con la Casa Blanca deberá abonar nada menos que mil millones de euros.
Jugadores como Carvajal y Asensio tienen en Real Madrid cláusulas de rescisión superiores a la de Neymar con Barcelona.
Incluso para el caso en que algún propietario millonario, en alianza con poderosos inversionistas, quisiera cometer la locura de pagar, las normas del Fair Play financiero impedirían cualquier transacción por una suma semejante, teniendo en cuenta que el pago de 222 millones de euros que el PSG debe realizar por Neymar ha levantado ya más de una denuncia por ir en contra de ésta normativa.
En un segundo nivel están los también indiscutibles Toni Kroos y Luka Modric, cuyas cláusulas de rescisión ascienden a 500 millones de euros, la misma cantidad que se le ha puesto a un recién llegado como Dani Ceballos. Por detrás figuran otros jugadores básicos en el esquema de Zinedine Zidane como Dani Carvajal o Marco Asensio, cuya libertad vale 350 millones; todas cláusulas que superan a la que fijó el club vulé en la última renovación de Neymar.
