Esteban Andrada tuvo mucha mala suerte. El arquero llegó como la gran figura que Boca necesitaba, y desde su rendimiento cumplió con esa promesa.

Pero ante Cruzeiro, por la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores, se quebró el maxilar inferior después de un duro golpe de su rival Dedé y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente.

En plena recuperación y soñando con volver lo antes posible, habló con el sitio oficial del club y segundo a segundo, contó como vivió el la jugada, como se encuentra ahora y sus consejos a Rossi, que lo reemplazó. 

Acá, las declaraciones del arquero:

+ "Pude ver la jugada después en las imágenes, pero en el momento nunca me imaginé que había sido una fractura. Cuando caigo, caigo inconsciente, pero en el momento me recupero y pensé que me había cortado el labio y nada más. Sentí el impacto muy fuerte en los oídos y traté de seguir. Al final sentía que en cualquier momento me caía".

+ "Jugué con mucho dolor, pero estábamos en una situación en la que el equipo necesitaba del esfuerzo de todos. Traté de dar lo máximo para mantener ese resultado y pudimos conseguir una buena ventaja para ir a jugar después en Brasil".

+ "Me acuerdo del remate de Edilson, lo habíamos estudiado en los videos antes del partido. Cuando toma la carrera larga, sabía que era difícil que me la tire por arriba. Entonces elegí quedarme en el palo para estar mejor posicionado. Ya estaba consciente y en ese momento lo único que importaba era poder sacar la pelota".

+ "Mis compañeros y el cuerpo técnico me dijeron después que había sido una locura lo que hice de seguir en la cancha. Pero en el momento, con la adrenalina del partido, no pensé en las consecuencias y por suerte lo pude terminar".

+ "Al principio cuando fuimos al Hospital querían fijarme la mandíbula de arriba y ahí se me iba a complicar para comer. Sólo iba a poder hacerlo con sorbete y se me iba a hacer difícil porque iba a perder mucho peso, sobre todo a mí que por genética acostumbro a ser flaco. Pero me pusieron placa por debajo y eso fue bueno porque me permitió no perder peso. Ahora ya estoy con el gimnasio y el cirujano me permitió hacer un trote suave y sin tanto impacto contra el piso".

+ "Volvería a salir con la misma convicción, obviamente. Sabemos que estamos expuestos al roce y, en el caso de los arqueros, mucho más. Al principio, seguramente, cuando empiece a entrenar tendré una sensación extraña, pero cuando esté al 100% no voy a tener problemas para atajar normalmente".

+ "El viernes tengo una consulta con el cirujano y ahí seguramente me van a evaluar para ver cómo sigue todo el proceso".

+ "Cuando me tocó estar en la Clínica y Agustín (Rossi) volvió a atajar, le dije que no le tenía que demostrar nada a nadie y que atajara como lo venía haciendo en los entrenamientos. En la vuelta de la Copa Libertadores, yo lo vi muy bien y tuvo acciones claves para poder pasar a semifinales. Lo hizo muy bien".