Lo que está haciendo André-Pierre Gignac esta tarde-noche se ve muy pocas veces en un campo de juego.

Es cierto que la defensa y la oposición que propone Puebla es nula y casi amateur, pero también es verdad que se necesita mucha calidad para realizar las acciones que está haciendo el francés en este encuentro.

El delantero recibió un pelotazo desde muy lejos, y con el cuerpo se sacó de encima a su defensor. Luego se perfiló, enganchó para adentro y pateó arriba, al segundo palo.

Poco tiempo después hizo su cuarto gol y el sexto de Tigres, que está goleando por 6 a 1 en el Estadio Universitario, en la jornada 16 de la Liga MX.