Stephen Curry se fracturó la mano el pasado 30 de octubre contra los Phoenix Suns, empeorando aún más la crisis de unos Golden State Warriors sumamente diezmados por las lesiones.
En este sentido, el base de los Warriors se sometió a un procedimiento quirúrgico para reparar la fractura en su mano derecha y, tras su recuperación inicial, debió volver a pasar por el quirófano hace un par de días.
De esta forma, el 2 veces MVP de la liga se removió los tornillos y ataduras que tenía en la mano para proceder con su rehabilitación, y se estipuló que volverá a ser examinado en febrero para determinar el próximo paso.
Hasta el momento de su lesión, Curry venía de capa caída con promedios de 20.3 puntos, 5.0 rebotes y 6.5 asistencias en 40% de campo, números muy por debajo de lo que nos tenía acostumbrados.
Asimismo, se presume que los Warriors podrían tomar la decisión de sentarlo por el resto de la temporada, teniendo en cuenta que sus probabilidades de clasificar a los playoffs son prácticamente nulas.