Boca-Vélez. Vélez-Boca. Sin duda, ambos equipos protagonizaron la llave más picantes de los cuartos de final de la Copa de la Superliga.
En la ida fue un 0-0 clavado y aburrido. La vuelta, apasionante por donde se la vea, tuvo llegadas claras para ambos pero ninguno pudo aprovechar.
De esta manera, todo se definió en los penales, y fue Mauro Zárate el encargado de patear el tercero para el Xeneize.
Lo que sorprendió no fue que lo meta, sino que lo festeje como lo festejó: gritando como loco, endemoniado, y golpeándose el pecho.
Qué mensajito del delantero…