Es casi un hecho que la Conmebol decidirá sacar la final de la Copa Libertadores de Santiago de Chile y mudarla a otra sede dentro del continente sudamericano.
La tensión que se vivie en Chile por las protestas provocaron que Conmebol decidiera trasladar de sede la gran final de la Copa Libertadores 2019. En ese momento, Bogotá y Medellín aparecieron como sedes candidatas para albergar este duelo.
En principio, la más perfilada era Bogotá, pero River Plate y Flamengo le bajaron el pulgar. Solo una razón hizo que ambos clubes no quisieran jugar en El Campín: la altura de la capital cafetera, a casi 2.400 metros sobre el nivel del mar.
Ya que ambos clubes negocian la sede neutral para jugar la final, River y Flamengo buscan el escenario ideal para enfrentarse por el título de la Libertadores. Santiago de Chile está prácticamente descartada.