Kylian Mbappé le soltó la mano, Luis Campos tampoco bendijo su continuidad y desde PSG ya le hicieron saber que debe buscarse destino. El futuro de Neymar pasa lejos del Parque de Los Príncipes, donde acumulan una millonaria deuda con el jugador que habrá que ver hasta que punto complica una venta con pocos interesados y menos posibilidades desde lo económico para el brasileño.
“A Neymar no le gusta entrenarse; ha jugado con tres o cuatro kilos demás durante años, pero en la competición ha sido el atacante más honrado del equipo, el que más ha corrido para ofrecerse y para defender”, afirmaban las fuentes del PSG a El País en una noticia que ya hace parte del mercado de fichajes. Hay varios puntos a tener en cuenta de cara a las próximas semanas.
El primero pasa por entender que son pocos o ninguno los equipos que ahora mismo puedan asumir el salario de un futbolista que cada 12 meses recibe hasta 30 millones de euros desde las oficinas de Qatar. Doha le ha soltado la mano a Neymar, pero saben que solo por medio de una cesión donde asuman parte de su ficha podrán desprenderse de un crack a que sus 30 años tendrá que renacer.
Una deuda que complica todo
El País no solo desveló el deseo del PSG por venderle, sino igualmente los montos que Neymar todavía debe cobrar de ese último contrato firmado con Nasser Al-Khelaifi en mayo del 2021. El vínculo del brasileño con el club que ahora pretende desprenderse de sus servicios, otro punto clave en la que puede ser la operación del año.
El medio de la capital española es claro en este sentido: PSG debe al ‘10’ una suma por 200 millones de euros. El padre del brasileño, clave en lo que ocurra, no tendrá problema en mover a su hijo de equipo siempre y cuando se abonen los montos pactados hace casi 13 meses. Neymar, la salida más cara de la historia del fútbol.