Paris Saint-Germain ganó un partido clave por el buen trabajo de Gianluigi Donnarumma y la jerarquía de Lionel Messi. No le sobró nada al líder de la Ligue 1 de Francia, pero le alcanzó para vencer a Niza, y cortarle el invicto a Didier Digard, en el Allianz Riviera por 2-0 por los goles del rosarino y de Sergio Ramos. Con esta victoria, vuelve a sacar seis puntos de diferencia con respecto a su escolta, RC Lens.
Como viene sucediendo habitualmente con el conjunto parisino, empieza muy bien, pero en los partidos apretados suele ceder demasiado en la parte final y ante las Águilas no fue la excepción. Es que desde los primeros minutos empezó a ejercer cierto dominio, no abrumador, pero que sí lo demostraba con ciertas llegadas al arco de Schmeichel.
Messi fue el que probó en un par de oportunidades al guardameta danés y lo encontró bien parado. Mbappé, en tanto, estuvo en un posición más centralizada, mientras el que acompañó las subidas por izquierda de Nuno Mendes fue un Carlos Soler, que todavía no se halla en París.
Para fortuna de Galtier, Messi se reencontró con el gol al minuto 26. En una jugada de derecha izquierda, Nuno Mendes trató de encontrar a Mbappé en primera instancia y al no poder, el balón le quedó nuevamente y esta vez lo encontró a Leo para que éste defina de primera casi en el área chica para el 1-0.
Con el correr de los minutos, PSG se fue quedando, a pesar de que Danilo Pereira tuvo el segundo, pero su pelota fue al palo. Niza empezó a animarse, lo complicó, pero hizo figura a Gianluigi Donnarumma. Al final de la primera parte, el italiano se destacó con dos atajadas: primero, al taparle una acción increíble a Pépé y, luego, un cabezazo a Moffi.
En la segunda parte, Gigio sumó un par de intervenciones para sostener el cero en su valla. Pero a PSG también lo ayudaba la suerte. Es que la mayor jugada de peligro del Niza llegó con una media vuelta de Dante, que no fue gol por un centímetro de línea. Literal. El balón no ingresó completamente y salvó al líder de la Ligue 1.
Niza merecía decidamente el empate desde hace rato, pero no podía con Donnarumma. Y encima, al minuto 76, de un córner de Messi, apareció la cabeza salvadora de Sergio Ramos para marcar el 2-0. Tercer gol de la temporada para el español de 37 años, cuyo futuro en el club es incierto, misma situación que su asistidor, el crack argentino campeón del mundo.
El equipo de Didier Digard tuvo una última chance clara donde Danilo Pereira casi convierte en su propia puerta, pero lo salvó el travesaño. Insólito, pero real, a PSG no le anotaron gol por la suerte y las buenas atajadas de Donnarumma.
Kylian Mbappé tuvo su chance con un remate casi con el arco vacío, pero la mandó por arriba del travesaño de forma increíble. Aún así, PSG se quedó con el triunfo: Messi y Ramos completaron el marcador y los parisinos toman aire para seguir con seis puntos de ventaja como líder.