El grupo B de las Eliminatorias de UEFA rumbo a Qatar 2022 está que arde. La derrota de España en Suecia volvió a dejar en claro que Europa viene achicando el margen entre sus potencias y segundas guitarras en el último tiempo. Luis Enrique y compañía tienen motivos de sobra para preocuparse, pero a eso que sumarle a los hombres de Andersson y su papel como matagigantes de las grandes competencias.
Rocosos, ordenados, fieles a su estilo y con un plan más que claro, Suecia sigue demostrando que está para competir casi con cualquiera. Los nórdicos son un hueso duro de roer desde hace varios años y todo apunta a que nuevamente pondrán a una potencia contra las cuerdas en la Eliminatoria. Dependen de si mismos para enviar a España al repechaje.
El terror de los grandes
Italia y Holanda se quedaron fuera del pasado Mundial gracias a Suecia en la fase de grupos y en aquel histórico repechaje que supuso un shock en todo el Calcio. Meses más tarde, Andersson se encargó de romper con todo en Rusia 2018, cuando avanzó como primero en un grupo donde si bien Alemania les venció, los germanos quedaron por fuera de la primera fase. Llegaron hasta cuartos de final.
Suecia viene en ascenso y nadie puede negarlo. Los más de 5 años del proyecto de Andersson se han convertido en una amenaza para los grandes, quienes como España ahora mismo sufren la efectividad en ataque de un equipo hecho para incomodar a sus rivales en todos os sentidos. Solo un resbalón de los nórdicos hará que no pasen de manera directa a Qatar.
Por su parte, España se enfrenta luego de la derrota de ayer a un duro presente. No solo tendrá que mejorar en juego para lo que viene, sino que tendrá que hacerlo esperando que Suecia no le termine mandando a un repechaje a doble partido donde selecciones como Serbia, Suiza, Ucrania, republica Checa, Holanda y hasta Alemania pueden ponerle al borde del abismo.