Desde el minuto en el cual el jugador se calza los botines y sale al campo de juego, solo busca cumplir un solo objetivo: ser campeón. Sin embargo, esta sensación de colocarse por encima del resto y levantar un trofeo a veces no es la más deseada por distintos motivos que pueden influir en la cabeza de las personas.
Con el corazón en la vereda de enfrente, pero con la camiseta de Boca en el pecho. Un momento muy difícil para uno de los campeones de la Copa Argentina 2015 que el Xeneize se terminó quedando con un 2-0 más que polémico ya que el juez del partido, Ceballos, cobró un penal que no era y un gol en offside.
Con la victoria de Boca consumada, y con todo el público festejando junto al plantel, el defensor Juan Cruz Komar era el único ausente en la celebración: “Sinceramente tuve que quedarme en el vestuario porque mi corazón me lo decía, no pude salir a festejar”, confesó el nuevo refuerzo de Rosario Central.
Sintiendo una “puja muy fuerte entre lo profesional y lo sentimental”, el ex Talleres que cumplirá su sueño de jugar en el Canalla comentó que no le “salió estar adentro festejando mientras la gente que quiero estaba muy dolida, y yo también lo estaba”, ya que sus familiares y amigos estaban en la cancha.
Finalmente, Komar contó que no festejar ese título con el Xeneize, ganó dos en total, no le dolió tanto ya que “tampoco me sentía completamente identificado con ese plantel porque no había jugado mucho”. Vale destacar que el defensor central sólo jugó cinco partidos en el Xeneize.