Antes que se abriera el libro de pases en el fútbol argentino, en Boca ya se habían comenzado a analizar diferentes posibles fichajes para reforzar al equipo que conduce Jorge Almirón de cara al tramo decisivo de la Copa Libertadores, que tendrá a Nacional de Uruguay como primera parada en octavos de final.

Con objetivos en el exterior y en el mercado local; también con un pedido expreso del entrenador por encontrar en el mercado un zaguero, un lateral derecho, un mediocampista creativo, un extremo y un delantero; Juan Román Riquelme estaba decidido a abrirle las puertas del club a un futbolista que ya había buscado en mercados anteriores.

Se trata de Tomás Belmonte, mediocampista mixto de Lanús que sin embargo decidió aceptar otra propuesta en línea con la política de la directiva Granate de intentar vender a sus futbolistas al exterior y no reforzar a competidores directos en el plano nacional.

Así las cosas, el jugador de 25 años aceptó partir rumbo a Toluca y según avanzó el periodista César Merlo estará firmando con el equipo mexicano un contrato que lo vinculará por cuatro años. Lanús vende el 80 por ciento de su ficha, en una cifra que todavía no se dio a conocer.

En las últimas semanas, Boca parecía haber desistido de negociar por la llegada de Belmonte, principalmente por entender que había otras posiciones que debían cubrirse con mayor urgencia, incluso cuando Alan Varela está próximo a ser transferido.