En una jornada histórica, Paris Saint-Germain se convirtió en campeón de Europa. Ganó 5 a 0 a Inter de Milán en la final de la Champions League más abultada de la historia con doblete de Doué, goles de Hakimi, Kvaratskhelia y Mayulu, para conseguir el título que tanto le fue esquivo.

Los de Luis Enrique fueron completamente superiores, en todos los aspectos del juego, en el trámite del partido y el resultado, aunque abultado, fue justo. Victoria y goleada inobjetable por parte de los parisinos que finalmente, luego de tanto intentarlo, pueden celebrar y gritar campeón.