Anoche, Talleres de Córdoba y Atlético Tucumán cerraron la llamada ‘fecha de clásicos’ del fútbol argentino. Al tener a sus dos clásicos rivales jugando en el ascenso, ambos clubes debieron emparejarse y medirse entre sí en este mal momento compartido.
El conjunto local terminó llevándose el triunfo en el Mario Alberto Kempes. Triunfo importante, que sirve para recargar energías y dejarle el camino allanado al sorpresivo sucesor de Ángel Guillermo Hoyos, el portugués Pedro Caixinha.
Mientras el club resolvía la situación del nuevo técnico, Javier Gandolfi se hizo cargo del primer equipo. El exmarcador central dirigió por dos partidos a varios de sus excompañeros y consiguió sacar el 100% de los puntos.
Sin embargo, quien surgió de River Plate no tiene aún el curso de entrenador hecho, por lo que debió firmar ¡como aguatero! para poder estar en el banco de los suplentes. Gran momento de El Producto.