Aunque Hernán Grana intentó con un comunicado quitarle gravedad a su inexplicable reacción durante un partido de baby fútbol que estaba disputando su hijo, en el que fue grabado intentando agredir al árbitro, el propio encargado de impartir justicia en dicho encuentro desmintió que la única intención del exjugador de Boca, actualmente en All Boys, hubiese sido pedirle que se esforzara por impedir que los pequeños futbolistas se golpearan en exceso.
“Primero me gritó, levantó la voz, y primero lo informé con el delegado. Se quedó ahí y no se calmó. Me gritó de nuevo y lo eché”, relató Ernesto Suasnabar en diálogo con Telenoche. Y explicó: “Ahí se metió a la cancha, y bueno, cuando obligué a que lo sacaran, desde la puerta del club me siguió insultado a decirme de todo. No hubo agresión física”.
Si bien Hernán Grana ofreció sus disculpas y aceptó que su conducta fue “totalmente desubicada”, en ningún momento reconoció haber insultado al árbitro. Por el contrario, en su comunicado escribió que “lo único que quería decirle era que les hablara (a los jugadores para que no se golpearan)”.
El árbitro del partido aseguró que reacciones como la del futbolista de All Boys no son la excepción en las jornadas de fútbol infantil, sino una realidad con la que tienen que convivir continuamente, muy perjudiciales para quienes están iniciándose en el deporte.
“Trístemente es muy común. Más protestas, agresiones verbales, físicas. Gracias a Dios no hubo agresiones físicas. La gente está muy violenta. Uno va preparado en la semana cómo va a manejar la jornada. El baby es perjudicado por los grandes. A los chicos los hablas y te entienden fácilmente. El problema son los padres, los técnicos y los delegados”, señaló.
El comunicado de Grana
Luego que las imágenes que lo mostraban ingresar a la cancha, empujar a una persona que intentó frenarlo y buscar llegar hacia el árbitro del partido, el exjugador de Boca publicó un comunicado en sus redes sociales para disculparse, pero también buscando quitarse responsabilidad por lo sucedido.
“Salgo a aclarar algo que pasó ayer en la jornada de baby donde jugaba mi hijo contra Racing donde alguna persona me filmó protestando al árbitro en el cual se ve que voy a hablarle. Fui a hablarle porque estaba dejando que nenes de 9 años se pegaran y no les decía nada. Entonces lo único que quería decirle era que les hablara”, trató de explicar.
Y continuó: “Me hago cargo de mi reacción totalmente desubicada y desmedida, no está bien y menos viniendo de un profesional como yo, pero jamás le quise pegar ni mucho menos. Sí, querer decirle que no deje que los nenes se peguen. Los que me conocen saben la clase de persona que soy y más con los nenes. Pido disculpas porque no era la manera ni el momento de hablar con el árbitro, principalmente por los nenes, pero mi único objetivo era que no se peguen más”.
Según Grana, le difusión del video tuvo detrás una intención de ensuciarlo, pero dijo estar tranquilo de “la clase de persona” que es y aseguró que “lo que se mostró en el video no fue la verdad de lo que pasó”.