Agustín Almendra ya se marchó de Boca, pero todavía no logró estampar la firma en su contrato oficial con Racing, por lo que Fernando Gago todavía no lo tiene a su disposición. Pero en el mientras tanto, desde la dirigencia se encargaron de abrochar al primer refuerzo.
La situación de Almendra se está volviendo algo engorrosa para los de Avellaneda, ya que el Xeneize le reclama al futbolista nacido en San Francisco Solano una suma de 500 mil dólares por un viejo aumento salarial que le otorgó, y hasta que no se resuelva la cuestión no podrá firmar junto a Víctor Blanco. Algo similar a lo que ocurrió con Cristian Pavón antes de emigrar a Atlético Mineiro.
Más allá de que Racing quiere que se resuelva rápido la situación con Juan Román Riquelme y compañía, ya que buscan que el futbolista de 23 años se ponga a las órdenes de Gago, el presidente racinguista se dirigió hacia la ciudad de las diagonales para cerrar la negociación con Gimnasia y Esgrima de La Plata por un lateral derecho.
En este caso, la Academia sumará a Guillermo Enrique, también de 23 años, que surgió de las inferiores del Lobo y a quien estaban buscándole un nuevo destino. Tras varios días de negociación, Blanco acordó con Mariano Cowen la compra del 80% del pase por una suma de 800 mil dólares.
Ya se realizó el cruce de contratos correspondiente, y ahora resta que Enrique se realice la revisión médica para luego estampar la firma en su nuevo contrato, el cual lo ligará a Racing durante los próximos cuatro años. Ahora, el cuerpo técnico de Pintita tiene a uno de sus apuntados para que pelee el puesto con Facundo Mura.