Detrás de un gran hombre hay una gran mujer, así reza el famoso refrán. Pero detrás de cada gran atleta, tiene que haber un entrenador, una persona capaz de sacar el máximo potencial y cada gota de talento de ese deportista. Michael Phelps y Léon Marchand encontraron el suyo en un modesto nadador que decidió dejar la piscina para entrenar con apenas 20 años y no se equivocó.
Michael Phelps es el dueño de los tres récords olímpicos más destacados en la historia: es el atleta con más medallas doradas en un mismo Juego Olímpico, con ocho en Beijing 2008. También es el atleta con más oros olímpicos con 23 preseas (seis oros en Atenas 2004, ocho más en Beijing 2008, cuatro en Londres 2012 y cinco en Río 2016) y suma 28 medallas en total, con tres preseas plateadas y dos de bronce que completan al resto.
Pero hay un hombre, un guía, un maestro… un gurú, detrás del gran Michael Phelps: Bob Bowman. Bowman ha sido el entrenador de Michael Phelps desde los once años, y lo acompañó en toda su carrera profesional. Más allá de las aptitudes, habilidad y capacidad de Phelps, es Bowman su secreto para el éxito.
“Entrenar con Bob fue lo más inteligente que he hecho, nunca voy a nadar para nadie más”, aseguró el propio Phelps en su momento. Hoy, Bowman es el entrenador de Léon Marchand, la gran estrella de París 2024 en la natación, y el héroe local para los galos. Sus dos medallas doradas ganadas con dos horas de diferencia (en 200m mariposa y 200m pecho) son un hito en la historia de las olimpíadas que nunca nadie había conseguido antes.
Bob Bowman, el secreto mejor guardado de Michael Phelps
Michael Phelps es uno de los atletas más condecorados de todos los tiempos, ya que a sus 28 medallas olímpicas hay que sumarle otras 54 en campeonatos mundiales y eventos de natación regulados por World Aquatics, el ente oficial. Fue ocho veces nadador del año y, en 2008, elegido como el deportista más importante del mundo. Y mucho de eso se lo debe a Bob Bowman.
Nacido en Columbia, Carolina del Norte, Bowman fue un nadador para Florida State en su etapa universitaria, pero con apenas 20 años comenzó a dedicarse a ser entrenador. Pasó como asistente por múltiples clubes y universidades, hasta llegar a Baltimore en 1996. Allí se transformó en el entrenador principal y produjo tres campeones nacionales, diez finalistas y cinco miembros del equipo nacional norteamericano. Allí conoció a Phelps, y todo cambió.
El impacto de Bowman en la carrera de Phelps fue tal que el nadador norteamericano se mudó a Michigan, luego a Baltimore y hasta a Arizona, cuando Bowman cambiaba de trabajo entre Universidades. Los entrenamientos de Bowman fueron descriptos por Phelps como si se tratara de un “sargento entrenando a los miembros de su ejército”, los cuales iban más allá de la natación como tal.
Juntos obtuvieron un total de 82 medallas entre mundiales y olimpíadas, con 65 de ellas doradas. Michael Phelps es uno de los atletas más grandes en la historia del deporte mundial, y Bowman fue su gran referente, guía y consejero a la hora de conseguir cada una de ellas.
Bowman transformó a Léon Marchand y se consagraron en París 2024
En 2021, Bowman fue contactado por el prospecto francés León Marchand, quien le mandó un mail pidiéndole un lugar dentro de su equipo de estudiantes. Sin conocerlo, Bowman lo aceptó y allí comenzó una nueva relación histórica.
Marchand comenzó a escalar en el mundo de la natación, y Bowman fue contactado por Francia para entrenar al equipo nacional a la vez que se mantenía con el equipo de Estados Unidos.
En 2023, la relación comenzó a dar sus frutos, con Marchand llevándose el oro en los 400 metros combinados, con récord mundial en el proceso, durante el campeonato mundial de natación. Y en estos Juegos Olímpicos, el nadador francés ha sido la sensación de la primera semana, con tres oros olímpicos, en 200 metros pecho, 200 metros mariposa y los 400 metros combinados.
La historia de Léon Marchand en la natación todavía tiene mucho camino, y por lo que parece, Bowman también tiene cuerda para rato, para estar a su lado y ayudar al francés a convertirse en uno de los atletas más destacados de la historia, algo que ya sabe de sobra como hacer.
Pueden llamarlo guía, maestro, gurú y hasta maestro Yoda, pero lo cierto es que Bob Bowman sabe cómo transformar buenos atletas en leyendas del deporte mejor que nadie, y está camino a hacerlo nuevamente