Senegal lo logró. Por primera vez en su rica historia futbolera, logró consagrarse campeón de la Copa de África. Fue victoria por penales ante Egipto, otra de las potencias del continente, tras un intenso 0 a 0 en los 120′.
El equipo liderado futbolísticamente por Sadio Mané derrotó a los de Mohamed Salah, quien no pudo ejecutar en la tanda debido a que se ubicó en el quinto lugar entre los pateadores.
Las celebraciones se extendieron a lo largo de todo el país. En Dakar, los autos coparon las calles y las caravanas poblaron las autopistas a la espera del regreso a casa de los nuevos héroes nacionales.
Del otro lado del océano, en el sur de la Argentina, un grupo de senegaleses decidió replicar los festejos a miles de kilómetros de casa. Es que en Las Grutas no se privaron de cantar y recorrer la avenida principal a puro color. ¡Hermoso!