River afronta un segundo semestre cargado de competencia, con la ilusión de pelear en el Torneo Clausura, los cuartos de final de la Copa Libertadores y los cuartos de la Copa Argentina. Sin embargo, en paralelo a la exigencia deportiva, el club también debe mirar de reojo lo que ocurrirá en diciembre. Allí se avecina un escenario complejo: ocho futbolistas terminan contrato a fin de año y, en caso de no renovar, podrían emigrar dejando vacantes sensibles en el plantel.

En ese sentido, la dirigencia y Marcelo Gallardo, que vienen de afrontar una profunda renovación de plantel en el último mercado, deberán evaluar los nombres que el equipo podría perder de cara al próximo año. Casos que van desde emblemas del ciclo hasta jugadores a préstamo o con futuro incierto. A continuación, el repaso uno por uno.

Enzo Pérez

Con 39 años, sigue siendo emblema y líder absoluto dentro y fuera de la cancha. Indiscutido en el once inicial, su contrato finaliza en diciembre y todavía no hay señales claras sobre su futuro. Todo indica que, si no acuerda una renovación, podría retirarse del fútbol profesional tras haber marcado una era en River.

Enzo Pérez termina su contrato en diciembre y no hay charlas por su renovación.

Milton Casco

Cumplirá una década en el club y, a sus 37 años, se transformó en un comodín: puede jugar por la izquierda o la derecha, aunque ya no es titular indiscutido. Gallardo siempre valoró su experiencia y su rol de rueda de auxilio. El propio jugador declaró en diferentes oportunidades su deseo de retirarse con la camiseta de River.

Nacho Fernández

El volante de 35 años regresó en 2023 desde Atlético Mineiro. Alternó entre titular y suplente, aunque en este semestre Gallardo lo volvió a usar con frecuencia, incluso en Libertadores y Copa Argentina. Gimnasia de La Plata lo tantea cada mercado para repatriarlo, pero su continuidad en River podría depender de cómo termine el año.

Gonzalo Martínez

Otra de las glorias de la era Gallardo, pero su regreso en 2023 se vio marcado por las lesiones: dos roturas de ligamentos y varios desgarros. Con 32 años, apenas pudo sumar minutos. Gallardo lo quiere cuando está disponible, pero su estado físico delicado y la poca continuidad pueden condicionar la extensión de su estadía. El desarrollo del semestre se presenta crucial.

Matías Kranevitter

Uno de los casos más claros: no es tenido en cuenta por Gallardo, entrena apartado y su contrato vence en diciembre. En el último mercado ya había buscado salida, pero no la consiguió. Quedará libre y su etapa en River tendrá un cierre definitivo.

Matías Kranevitter, mediocampista de River que está relegado del plantel.

Federico Gattoni

Caso similar a Kranevitter, con la diferencia de que se encuentra a préstamo desde Sevilla, club dueño de su pase. Nunca logró ganarse un lugar en la consideración de Gallardo. Sin minutos, deberá volver a España cuando finalice su cesión. Es otra de las salidas aseguradas a fin de año.

Giuliano Galoppo

Llegó a préstamo desde San Pablo en enero y se transformó en una pieza importante del mediocampo gracias a su olfato goleador y aportes ofensivos. Tiene una opción de compra por 3 millones de dólares y, si mantiene el nivel actual, es probable que la dirigencia analice seriamente hacer el esfuerzo económico para retenerlo.

Miguel Borja

El caso más delicado: es uno de los jugadores con más rodaje y de mayor peso en el plantel, pero atraviesa una sequía goleadora preocupante. Gallardo lo sigue utilizando, aunque el futuro está en suspenso y las charlas por una renovación no avanzaron. Si no mejora su nivel, podría salir en diciembre, como también un reencuentro con las redes podría asegurarle la permanencia. La competencia interna con Sebastián Driussi y Maxi Salas le suma presión.

Borja, con futuro incierto en River

Con estos ocho jugadores en la cuerda floja, River podría enfrentar una nueva renovación profunda de su plantel en diciembre. Al margen de que algunos casos parecen casi definidos (Kranevitter, Gattoni), el resto posiblemente se definan dentro de la cancha, donde aún está todo por verse en el Millonario. Por lo pronto, Gallardo pone el foco en lo futbolístico, aunque sus análisis podrían repercutir más adelante.