En el marco de la causa de abuso sexual en la que está implicado, Gonzalo Montiel fue citado por la Justicia. El defensor del Nottingham Forest y la Selección Argentina deberá hacerse una pericia psicológica y tendrá que viajar a Buenos Aires entre el 17 y el 20 de septiembre.
El campeón del mundo está convocado para presentarse en la Asesoría Pericial de San Justo, donde deberá hacerse algunas evaluaciones psicológicas que serán tenidas en cuenta para la investigación por presunto “abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos o más personas“.
También fue citado Alexis Acosta, el otro imputado de la causa, quien tendrá que asistir al mismo lugar unos días antes: el 2 y 5 de septiembre.
Cabe recordar que el jugador surgido en River está acusado por un episodio ocurrido en 2019, que tuvo lugar en Virrey del Pino, en el domicilio de su familia. La denuncia fue efectuada por una joven llamada Carolina, quien hace unos meses apareció públicamente y aseguró: “Gonzalo me violó“.
En junio de 2023, el futbolista se presentó para declarar ante la Unidad Funcional de Violencia Familiar y de Género N°3 de La Matanza y negó los hechos por los que fue denunciado.
El crudo testimonio de la denunciante de Gonzalo Montiel
En un video difundido en abril por TN, Carolina contó su historia públicamente por primera vez: “Soy modelo y azafata, sobreviviente de un abuso sexual grupal donde el principal autor fue Gonzalo Montiel, nuestro último gol en el Mundial”.
“Llego y estaba Gonzalo, se acerca el auto, lo apaga y, entramos a la casa. Era un patio chico y allí estaba la familia. Se para la mamá de Gonzalo, estaba el papá, tíos y primos y en el fondo había como una reunión, una fiesta con música. Me acuerdo que me prepararon un fernet”, comenzó narrando.
Y continuó: “En un momento me empiezo a sentir mal, me empiezo a marear y yo decía que no podía ser. Le mando un mensaje a Gonzalo y le digo que me siento mal y que tengo miedo. Le pregunto si me podía llevar a mi casa”.
“Cuando voy al baño, dejo el celu cargando y cuando entro al baño estaba muy descompuesta. Me lavo la cara y cuando salgo lo veo a Gonzalo. Eso fue lo último que vi y pierdo la conciencia. Me despierto en la calle y estaba toda mojada. Escucho gritos y era la hermana que me insultaba, me quería pegar. No sé cómo llegué a mi casa, sí me acuerdo haber subido las escaleras agarrándome“, aseguró.
Después, reveló: “Me despierto a las 8 de la noche de ese día, el 1 de enero, y me empiezo a mirar y tenía hematomas en la pierna y no entendía qué había pasado. Tenía un mensaje de Gonzalo preguntándome si estaba bien y me dice que había estado con alguien. Yo le digo ‘imposible'”.
“Luego me llama la mamá de Gonzalo: ‘Hola mamita, soy Marisa. Mamita te violaron, ponete óvulos’. ‘¿Cómo que me violaron?’, dije e inmediatamente me puse a llorar. Después de esto empiezo un proceso psicológico”, añadió.