Es de público conocimiento lo que sucedió el martes pasado en el marco del partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores de América, cuando Boca Juniors quedó eliminado ante Atlético Mineiro. Tras los penales, el Xeneize se despidió del certamen continental, aunque lo hizo envuelto en una gran polémica arbitral.

Como consecuencia de ello, se generaron disturbios luego del partido. En los mismos participó la delegación del equipo comandado por Miguel Ángel Russo, por lo cual, posteriormente, debió quedar aislada al retornar al territorio argentino. En ese contexto, Boca tuvo que visitar a Banfield, por la Liga Profesional de Fútbol, con una alineación juvenil.

El Xeneize estuvo a la altura de las circunstancias y empató 0-0. Sin embargo, la dirigencia tomó la decisión de solicitarle a la Liga Profesional de Fútbol que postergue el partido contra San Lorenzo de Almagro de este martes, por la tercera fecha. El objetivo era posponerlo para que puedan jugar los titulares, algo que, finalmente, no tuvo efecto.

Este lunes, mediante un comunicado oficial, la propia Liga Profesional de Fútbol de Argentina desestimó la solicitud de Boca, que tendrá que recibir al Ciclón de Paolo Montero con un equipo completamente alternativo. Eso sí: el propio ente rector hizo lugar a la solicitud de reprogramar los próximos dos partidos de la Reserva.

"De conformidad con lo dispuesto por el artículo 27 del Reglamento General de AFA en su artículo 105 establece que: 'Ningún partido podrá ser postergado a no ser que concurran las circunstancias establecidas en el artículo 121 de este Reglamento y ningún club podrá solicitar la suspensión de determinado partido aun cuando le resultara dificultosa la concurrencia de sus jugadores", indicó dicho comunicado.