El plantel de Boca ya se encuentra en San Luis para que, este domingo desde las 17, enfrente a Racing bajo el marco del Trofeo de Campeones. Los dirigidos por Hugo Ibarra buscarán su tercer título en el año, y así llegar a las fiestas con la panza llena de campeonatos.

Con vistas a lo que será el encuentro en el estadio Único de Villa Mercedes, el entrenador de Boca deberá resolver diversas cuestiones que tienen que ver con el armado del equipo, donde la principal ausencia podría ser la de Darío Benedetto, como así también la de Luca Langoni. Ambos jugadores no estuvieron en la práctica futbolística de este sábado por la mañana, y los esperarán hasta último momento.

Si Ibarra determina que Benedetto y Langoni no formen parte del equipo titular, en el Xeneize ya tienen bien en claro quiénes los reemplazarán: Luis Vázquez y Norberto Briasco, respectivamente. Además, junto a los mencionados estará Sebastián Villa, una carta fundamental para los de La Ribera. Pero más allá de estas posibles modificaciones, hubo una gran ausencia en el viaje hacia San Luis.

Los integrantes del cuerpo técnico decidieron que Marcos Rojo se quede en Buenos Aires para evitar el constante movimiento de la rodilla operada tras la rotura de ligamentos, ya que el plantel de Boca debía tomarse un vuelo hacia la provincia puntana, y luego subirse a un micro. Y esta decisión se tomó luego de que, junto a Carlos Zambrano y sus respectivas parejas, dijeron presente en el estadio José Amalfitani, donde el artista portoriqueño, Bad Bunny, dio el primero de sus dos shows en el país.