Este miércoles, bajo la órbita de los octavos de final de la Copa Argentina, Boca Juniors y River Plate volvieron a verse las caras en el marco de una nueva edición del siempre apasionante Superclásico. En esta oportunidad, el Xeneize y el Millonario midieron fuerzas en el Estadio Ciudad de La Plata.
En ese contexto, el trámite del compromiso fue realmente apático, con más pierna fuerte que buen juego y sin grandes luces. Así fue como, poco a poco, los equipos comandados tácticamente por Miguel Ángel Russo y Marcelo Gallardo edificaron una paridad sin anotaciones.
Por supuesto, esto derivó en la definición por penales. Y, desde los doce pasos, Boca volvió a ser más efectivo que River. Apoyado en un Agustín Rossi gigante y con muy buenas ejecuciones por parte de sus jugadores, el Xeneize se quedó con la clasificación hacia los cuartos de final.
Posteriormente, los entrenadores se fundieron en un abrazo mientras los jugadores de Boca festejaban y los de River se lamentaban. Allí fue cuando Miguel Ángel Russo sorprendió a propios y extraños brindándole a Marcelo Gallardo una frase tan curiosa como llamativa.
“Mucha suerte en la Copa”, le dijo el experimentado director técnico de Boca a su colega, haciendo referencia, claramente, al compromiso que River tendrá que afrontar contra Atlético Mineiro por los cuartos de final de la Copa Libertadores de América, el contrincante que eliminó al Xeneize de dicho certamen.