Después de lo que fue el 2-1 en el Gigante de Acero, América cambió totalmente el chip y salió a jugar en el Estadio Azteca con una mentalidad ganadora.

 

En el inicio del juego, Federico Viñas abrió el marcador para las Águilas y sobre el cierre, precisamente a los 41 minutos, apareció Richard Sánchez para darle la vuelta al resultado.

El volante central paraguayo encontró un rebote en el borde del área, frenó el balón y lo colocó contra el palo derecho de Marcelo Barovero, quien voló sin respuesta.

 

Se desató la fiesta en el Estadio Azteca: las Águilas ya consiguieron una ventaja considerable para ser campeones y solo tendrán que aguantar los próximos 45 minutos.