Ya es un hecho que River no jugará ningún partido de la fase de grupos de la Copa Libertadores 2020 con público en El Monumental.

El Millonario recibió una fecha de sanción por usar bengalas en la ida de la semifinal ante Boca en la edición pasada, y dos por la agresión al micro del Xeneize en la final del 2018 que se terminó jugando en Madrid.

A todo esto, se le sumó la mala noticia de que el club de Núñez deberá visitar la altura por duplicado jugando de visitante.

Pasa que Binacional, que comparte grupo con el equipo de Gallardo, fue advertido por la Conmebol ya que la iluminación de su estadio no cumplía con los requerimientos. 

Todo indicaba que el conjunto peruano iba a mudar su localía, pero el gobierno intervino, puso el dinero y renovó la cancha. 

De esta manera, el fin de semana se estrenarán las nuevas luces y los dirgidos por el Muñeco deberán jugar a 3.824 metros sobre el nivel del mar. Una locura.

Como si fuera poco, otro de los integrantes del grupo es la Liga de Quito, que tiene su estadio a 2.850 metros de altura. 

El último rival de esta instancia no presenta la misma dificultad, pero es el que en la previa se perfila como el más complicado: Sao Pablo.