Aprovechando el parate futbolístico por Fecha FIFA, Nicolás Burdisso viajó a Italia y visitó el predio de la Roma, club en el que jugó entre 2009 a 2013.
Desde dicho país europeo señalan que la breve estadía del director deportivo de Boca no se debió a una simple coincidencia o por nostalgia.
Burdisso habría mantenido una larga y tendida charla con nada más y nada menos que dos deportistas de la Roma, con el fin de tentarlos y meterles en la cabeza la idea de viajar a Argentina para jugar en el Xeneize.
Los nombres en cuestión serían bastante pesados teniendo en cuenta la calidad y la historia que cada uno tiene en su espalda.
El primero sería Diego Perotti, quien ya tuvo la chance de jugar en Boca (2014), aunque no tuvo muchas chances de saltar al verde césped por una lesión que lo marginó gran parte de su estadía.
El segundo escalaría y llegaría a los lugares más altos de la gloria del fútbol italiano: el gran Daniele De Rossi, quinto jugador con más apariciones en la Selección de Italia.
