Darío Benedetto concedió una entrevista a ESPN en la que, más allá de su presente futbolístico en Olympique de Marsella, le concedió mucho tiempo a Boca, club por el que pasó y del cual es hincha.

Fue allí que el delantero reconoció que le hubiera gustado que su despedida se desarrollara de otra manera, por esa comunión que se había generado entre él y los hinchas.

"Me hubiese gustado irme jugando el último partido. No lo jugué porque me lastimé en un amistoso contra Atlético Tucumán, pero estaba previsto que juegue antes de irme. Me hubiese gustado despedirme de la gente jugando", expresó el Pipa.

Además, se mostró ilusionado con la llegada de Juan Román Riquelme a la vida política de Boca y hasta se atrevió a pensar en un llamado del ídolo.

"Riquelme es un ídolo del club, cómo no me va a gustar que esté metido en Boca. Al igual que los otros ídolos. Pueden aportar mucho. Si me llama lo tendría que pensar. Pero estuve mucho tiempo para jugar en Europa, quiero tener el sueño de jugar una Champions", destacó Benedetto.

Claro que más allá de sus deseos y expectativas en el fútbol europeo, hay un cierre de la historia que el delantero tiene claro: "A Boca nunca le voy a cerrar la puerta. Voy a volver. Si no es como jugador, será como hincha. A La Bombonera vuelvo seguro".