En el pasado, Roberto Tobar no tuvo unos manejos acordes y partido a partido trata de borrar esa mala imagen.

El silbato del partido por la final de la Copa América fue suspendido por ocho meses debido al sorprendente "Club de Poker", en el cual se comprobaron algunos casos de corrupción del fúbtol chileno.

Durante su inactividad Tobar empezó a modificar el pensamiento y su nivel mejoró. El ábritro de la gran final de la Copa América también se dio el lujo de dirigir la definición entre Boca y River el año pasado.

Habrá que esperar el descenlase de esta historia en donde Tobar deberá realizar una impecable presentación ante una edición de Copa América cargada con polémicas.