Este martes, Gustavo Alfaro, a sus 56 años y 27º año como entrenador, vivió algo que nunca había vivido antes.

En el encuentro contra Deportes Tolima, el oriundo de Rafaela, Santa Fe, ingresó por primera vez a La Bombonera por Copa Libertadores.

La cámara de TyC Sports captó la caminata del entrenador desde el túnel hasta el banco de suplentes, donde miró hacia los dos lados de la tribuna.

"Fue maravilloso. Vivir una noche de Copa Libertadores en La Bombonera son expresiones únicas, a veces irrepetibles. Y por eso me tomé esa fracción de tiempo donde fui Gustavo Alfaro, un ser humano común y corriente que caminaba desde el túnel hasta el banco de suplentes hasta que llegué al banco y me transformé en el entrenador de Boca para disfrutar de eso", declaró después de la goleada por 3-0.

Además, contó qué se le pasó por la cabeza cuando vivió ese momento: "Las luchas de cuando estaba en Rafaela, cuando era pibe y todos los días volvía del Club Atlético Rafaela con las rodillas peladas y la pelota bajo el brazo y soñaba con los domingos de Primera. Ver ese lugar donde estaba y decir: 'Puta, el sueño del pibe se hizo realidad'". 

Por el último, el periodista le mencionó que tenía los ojos llorosos y atinó a contestar: "Fue muy fuerte".