Negar que las derrotas ajenas se festejan como propios por los rivales no existe. En el fútbol, que pierda el "enemigo" es causa de, por lo menos, una mueca de alegría.

En Lima, Perú, River perdió la final de la Copa Libertadores en tres minutos y se quedó a las puertas de tener un trofeo menos que Boca.

Por eso, el doblete de Gabriel Barbosa, más conocido como Gabigol, causó todo tipo de alegrías en los xeneizes.

Sin embargo, a veces son pocos los que lo reconocen. Blas Giunta, referente e ídolo del Xeneize, no tuvo problema en admitir esa felicidad.

"Hay que sacarse las caretas, yo grité los goles de Flamengo. Ellos festejan cuando nos ganan a nosotros", tiró en una entrevista con TyC Sports.

Giunta lo confesó, ¿pero cuántos hinchas habrán gritado el 2-1 de Gabigol?