Cuando Paolo Guerrero comenzó a jugar en el Inter de Porto Alegre no paró de hacer goles. Hinchas y jugador estaban contentos de tenerse el uno al otro.

Luego, el Depredador tuvo una sequía que vino acompañada de fracasos deportivos del club. La Copa Libertadores y la Taca do Brasil fueron dos ejemplos de esto. 

Ahora el 9 disputa solo el Brasileirao ya sin chances de salir campeón, pues su exequipo, Flamengo, es el primero con diferencia. Con esto, en la última fecha, Guerrero se enfrentó al Fluminense y habló del apoyo del hincha colorado en estos momentos. 

"Es dificil jugar en un clima así", disparó el Pistolero. "Estadio en silencio con una parte de la hinchada que no apoya", continuó el Depredador sobre la torcida del Inter. 

Así, Guerrero, que hasta hace poco decía que en casa eran invencibles y resolvían todo ahí, ahora se volvió contra los aficionados. Habrá que ver cómo sigue la relación, pues seguramente al 9 lo quieren en otros lados.