Pablo Carreño ha sido una de las grandes sorpresas de las últimas horas en los Juegos Olímpicos. El tenista español venció a Novak Djokovic en el partido por la medalla de bronce en Tokio 2020, imponiéndose6-4, 6-7 (6/8) y 6-3 en un partido de 2 horas y 49 minutos. El asturiano salió del partido entre lágrimas por el logro olímpico.
El partido por la medalla de bronce en el campeonato de tenis masculino individual fue una verdadera batalla. Pablo Carreño le luchó de igual a igual a Novak Djokovic desde el inicio del encuentro, para lo que acabó siendo un juego de altísima intensidad en la capital japonesa por la tercera plaza del podio.
Luego de dominar el primer set, el número 11 del mundo cayó en un tie break de infarto en el segundo. Sin embargo, mantuvo al serbio a raya en el último set, haciendo el quiebre desde los primeros games. Finalmente, pese a que el mejor del mundo intentaba recortar las distancias, el español logró cerrar el partido en el noveno juego para teñirse de bronce en Tokio 2020.
Partido emotivo
“Era un partido muy importante. Después de ganar a Medvedev en cuartos, parecía que la medalla se acercaba y sin embargo se alejó tras mi derrota y la de Djokovic en semifinales. Pero me recuperé física y mentalmente.Tuve un momento de duda cuando no pude cerrar el segundo set. Pero en el tercer juego del tercer set volví a coger impulso. Es una alegría tremenda” declaró el medallista luego de su gran victoria.
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Pablo Carreño le dio un valor especial a la medalla olímpica con respecto a otros logros. “Estoy incluso más contento. Es una sensación nueva. He ganado Copa Davis, títulos ATP, he llegado lejos en torneos importantes… Pero esto es indescriptible. Sentí todo el apoyo de España, de Asturias, de mis familiares, de gente que no sigue tanto el tenis. He recibido un millón de mensajes animándome después de perder. La gente no se vino abajo y creyeron en mí”.
“Era muy importante para mí. En Río estaba entre los 30 primeros, pero era el sexto español por ranking y me quedé fuera. Desde entonces, deseaba como un loco estar en unos Juegos Olímpicos. Cuando me enteré de que no se iban a celebrar, me vineabajo. Pero al final he llegado en un momento físico y mental muy bueno, como demostré toda la semana. El bronce es un sueño hecho realidad” concluyó el español.