Este miércoles, luciéndose ante los ojos del mundo una vez más, Zlatan Ibrahimović fue la figura del encuentro en el que el Milan le ganó 4 a 1 a la Sampdoria. Firmando un partido más que admirable a escasas semanas de cumplir 39 años, el artillero sueco abandonó el campo de juego habiendo participado en los tres goles de la visita.

El ex Barcelona golpeó primero cuando el telón se había levantado hace instantes: capturando con su cabeza un centro certero de Ante Rebić, el goleador del elenco comandado técnicamente por Stefano Pioli, en completa soledad, puso el 1 a 0 superando de por medio la defensa impuesta por parte del arquero Wladimiro Falcone.

+ Ibrahimović puso el primero:

Ya en la segunda etapa, asociándose de forma impecable con Hakan Çalhanoğlu, la figura del partido demostró que es capaz de convertirse en asistidor si así lo desea. Divisando a su colega ingresar a toda velociadad al área rival, Zlatan le dio un gran pase al turco, quien con un remate violento dejó sin reacción a Falcone y marcó el segundo tanto del compromiso.

+ Çalhanoğlu capitalizó una asistencia fenomenal de Zlatan:

En una devolución de favores, Hakan, en pos de darle el golpe de gracia al dueño de casa y comenzar a cerrar la hostoria, le cedió el balón a Zlatan para que marque el 3-0. El sueco, fiel a su estilo y tomándose unos pequeños instantes para diagramar la resolución de la jugada, remató con la suficiente fuerza para que el arquero rival no logre desviar del todo su disparo y estiró aún más la ventaja.

+ Ibra firmó su doblete con el 3 a 0:

Aunque el tanto de Kristoffer Askildsen a los 87 minutos le dio esperanzas al local de poder concretar una remontada histórica y poder sumar aunque sea una unidad y no quedarse con las manos vacías, Rafael Leão decretó el 4 a 1 final en el tiempo suplementario y se encargó de cerrar la goleada en favor del Milan.

+ El descuento de Kristoffer y el tanto de Leão: