En octubre del presente año y cuando Lucas Martínez Quarta se encontraba en su mejor momento futbolístico, habiéndose asentado incluso en la Selección Argentina, se concretó el desembarco del defensor central en el viejo continente.

Fiorentina, elenco que milita en la máxima categoría del fútbol italiano, fue quien confió en los servicios del futbolista nacido en Mar del Plata, provincia de Buenos Aires. Y lo hizo por una cifra relativamente accesible para los tiempos que corren.

En ese entonces, Fiorentina desembolsó solamente seis millones de euros por Martínez Quarta pero con el detalle de que tendrá que abonar otros seis millones de la misma moneda cuando el futbolista cumpla 30 partidos en la institución.

En aquel momento, en River pareció bastante factible que el jugador de 24 años de edad alcance esa cantidad de encuentros oficiales rápidamente. Sin embargo, la historia fue empeorando de manera contundente para Martínez Quarta.

Sucede que Fiorentina comenzó muy mal su andar en la Serie A de Italia y por ello debió marcharse Guiseppe Iachini, su director técnico. Cesare Prandelli fue su reemplazante y de inmediato relegó al argentino para jugar con línea de tres.

Desde el arribo de Prandelli, Martínez Quarta no vio un solo minuto. Por ende, solamente quedó en los tres cotejos que disputó con Iachini. Es decir que todavía tiene que ver acción en 27 encuentros para que River cobre los otros seis millones.