Si bien Boca, a partir de la apertura del marcador, padeció gran parte del cotejo ante el Barcelona, eso no le impidió a sus jugadores disfrutar y darse el lujo de mostrarse al mundo.

La ilusión de levantar el Trofeo Joan Gamper ya estaba lejos. En los últimos minutos de encuentro, el Xeneize buscó el gol de descuento para retirarse con aunque sea un tanto marcado en el Camp Nou.

A los 88, Cristian Pavón buscó desbordar e ingresar al área Culé, pero se topó con el impasable Sergio Busquets.

La jugada prosiguió más lejos, en la banda izquierda del campo de juego. Allí, el jugador de Boca le regaló un gran lujo a todos los allí presentes.

Ante la presión del jugador del Barcelona, Pavón, de espaldas a su marcador, dibujó un caño y dejó en ridículo al deportista español.