Wanda Nara no es solamente la mujer de uno de los delanteros más importantes del fútbol mundial.

La modelo, ahora también empresaria, administra la carrera de su marido Mauro Icardi, goleador y capitán del Inter.

 

 

Ayer, pese al interés de varios clubes grandes por contratar al delantero argentino, Wanda usó su cuenta de Twitter para dar una idea de lo que ocurrirá con su futuro.

"Son las 0.30 y aún sigo leyendo las páginas de la renovación del contrato", escribió en italiano en la red social.

Los dirigentes nerazzurros saben que la tendrán difícil para negociar con Wanda, pero al menos pueden quedarse tranquilos: su goleador, tarde o temprano, confirmará que sigue en casa por algunos años más.